Los pensamientos negativos son distorsiones cognitivas que suelen ocasionar que la persona sufra periodos de depresión, ansiedad o cambios de humor negativos que no le permiten llevar su vida satisfactoriamente.
Las técnicas cognitivas te ayudan a identificar y desafiar pensamientos negativos. Estas son algunas que puedes implementar:
La mente tiende a alimentar un ciclo vicioso donde el pesimismo se convierte en un obstáculo para buscar ayuda o mejorar.
Pensar en lo que te da felicidad: centrarte en pensamientos positivos puede hacer retroceder los negativos. Hacer una lista diaria de cosas buenas puede ayudarte a revalorizar aspectos de tu vida que antes pasaban desapercibidos.
La plan no es reciclar el pensamiento negativo, sino agotarlo, consumirlo por medio del ejercicio, mantener la mente ocupada haciendo que el cuerpo trabaje y así no caer en la trampa de nuestra propia psique.
Las rumiaciones son patrones de pensamiento excesivos. Podemos pensar una y otra vez en una thought convencidos de que cuanto más pensemos en ella más capaces seremos de solucionarla, a pesar de que esto es una acción totalmente inútil y que nos hace perder el tiempo y gran parte de nuestras energías.
El pensamiento negativo es un tipo especial de pensamiento en el que una persona ve obstáculos sólidos, dificultades en el camino hacia la consecución del objetivo y fantasea con el triste desenlace de los acontecimientos.
Sustitución de pensamientos: Reemplaza afirmaciones negativas con afirmaciones positivas o realistas.
La impotencia es un comportamiento aprendido que puede o no derivarse de circunstancias debilitantes de la vida authentic.
En resumen, el pensamiento negativo no solo afecta cómo ves el mundo; impacta directamente tu calidad de vida. ¿Te has dado cuenta de cómo esos pensamientos pueden moldear click here tus experiencias diarias?
Por ejemplo: Un niño que ha sufrido bullying en el colegio, puede llegar a creer que todas las personas a su alrededor de alguna u otra forma quieren hacerle daño.
Patrones de pensamiento aprendidos: Las creencias limitantes adquiridas durante la infancia afectan tu capacidad para ver lo positivo.
Aceptar que los pensamientos negativos son parte de la experiencia humana es clave, pero también lo es entender que puedes elegir cómo relacionarte con ellos.
Conectar con tus valores: preguntarte qué aspectos importantes de tu vida se ven bloqueados por ese pensamiento.